Löydetty 214 Tulokset: ayuda al prójimo

  • Porque toda la Ley está resumida plenamente en este precepto: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. (Gálatas 5, 14)

  • Por eso, renuncien a la mentira y digan siempre la verdad a su prójimo, ya que todos somos miembros, los unos de los otros. (Efesios 4, 25)

  • Porque sé que esto servirá para mi salvación, gracias a las oraciones de ustedes y a la ayuda que me da el Espíritu de Jesucristo. (Filipenses 1, 19)

  • Espero, con la ayuda del Señor Jesús, enviarles muy pronto a Timoteo para tener noticias de ustedes y experimentar yo mismo un alivio. (Filipenses 2, 19)

  • Conserva lo que se te ha confiado, con la ayuda del Espíritu Santo que habita en nosotros. (II Timoteo 1, 14)

  • ¿Acaso no son todos ellos espíritus al servicio de Dios, enviados en ayuda de los que van a heredar la salvación? (Hebreos 1, 14)

  • Por lo tanto, si ustedes cumplen la Ley por excelencia que está en la Escritura: Amarás a tu prójimo como a ti mismo, proceden bien. (Santiago 2, 8)

  • Y no hay más que un solo legislador y juez, aquel que tiene el poder de salvar o de condenar. ¿Quién eres tú para condenar al prójimo? (Santiago 4, 12)

  • De la misma manera, ustedes, los jóvenes, sométanse a los presbíteros. Que cada uno se revista de sentimientos de humildad para con los demás, porque Dios se opone a los orgullosos y da su ayuda a los humildes. (I Pedro 5, 5)

  • Pero la tierra vino en ayuda de la Mujer: abrió su boca y se tragó el río que el Dragón había vomitado. (Apocalipsis 12, 16)


“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina