Löydetty 105 Tulokset: derrota de los amorreos

  • Si él es capaz de combatir conmigo y me derrota, seremos esclavos de ustedes. Pero si yo puedo más que él y lo derroto, ustedes serán nuestros esclavos y nos servirán". (I Samuel 17, 9)

  • Al reanudarse la guerra, David salió a combatir contra los filisteos; les infligió una gran derrota y ellos huyeron ante él. (I Samuel 19, 8)

  • David fue a Queilá con sus hombres; atacó a los filisteos, se llevó sus rebaños y les infligió una gran derrota. Así salvó David a los habitantes de Queilá. (I Samuel 23, 5)

  • Yo me abalancé sobre él y lo maté, porque sabía que no podría sobrevivir a su derrota. En seguida le quité la diadema que tenía en la cabeza y el brazalete que llevaba en el brazo, y aquí se los traigo a mi señor". (II Samuel 1, 10)

  • Enton-ces David convocó a los gabaonitas y les habló. Ellos no pertenecían a Israel, sino que eran un resto de los amorreos, con quienes los israelitas se habían comprometido mediante un juramento. Sin embargo, Saúl había intentado eliminarlos, en su celo por Israel y Judá. (II Samuel 21, 2)

  • Guéber, hijo de Urí, en la región de Galaad, el país de Sijón, rey de los amorreos, y de Og, rey de Basán. Él tenía además un prefecto en el país de Judá. (I Reyes 4, 19)

  • A los sobrevivientes de los amorreos, los hititas, los perizitas, los jivitas y los jebuseos, que no pertenecían a Israel (I Reyes 9, 20)

  • Entonces salió el rey de Israel y se apoderó de los caballos y los carros, infligiendo a Arám una gran derrota. (I Reyes 20, 21)

  • Él cometió las peores abominaciones, yendo detrás de los ídolos, como lo habían hecho los amorreos que el Señor había desposeído delante de los israelitas. (I Reyes 21, 26)

  • "Porque Manasés, rey de Judá, cometió estas abominaciones, porque superó en maldad a todo lo que habían hecho los amorreos antes que él, y también hizo pecar a Judá con sus ídolos, (II Reyes 21, 11)

  • también de los jebuseos, de los amorreos, de los guirgasitas, (I Crónicas 1, 14)

  • A los sobrevivientes de los hititas, los amorreos, los perizitas, los jivitas y los jebuseos, que no pertenecían a Israel (II Crónicas 8, 7)


“Cada Missa lhe obtém um grau mais alto de gloria no Céu!” São Padre Pio de Pietrelcina