Löydetty 95 Tulokset: guerreros

  • Oholá se prostituyó mientras me pertenecía: se enamoró perdidamente de sus amantes, de los asirios, guerreros (Ezequiel 23, 5)

  • Ella se enamoró perdidamente de los asirios, gobernadores y prefectos, guerreros espléndidamente vestidos, hábiles jinetes, todos jóvenes y atrayentes. (Ezequiel 23, 12)

  • a los babilonios y a todos los caldeos, a los de Pecod, de Soa y de Coa -y con ellos, a todos los asirios- jóvenes atrayentes, gobernadores y prefectos, escuderos, guerreros y jinetes. (Ezequiel 23, 23)

  • Hombres de Persia, de Lud y de Put servían en tu ejército como guerreros. Ellos colgaban de ti escudos y cascos y realzaban tu esplendor. (Ezequiel 27, 10)

  • Por la espada de guerreros, los más feroces entre las naciones, yo haré caer a tu multitud. Ellos abatirán la soberbia de Egipto y toda su multitud será destruida. (Ezequiel 32, 12)

  • Entonces los más fuertes guerreros y sus ayudantes les dirán, desde el medio del Abismo: "¡Han bajado y yacen tendidos los incircuncisos, víctimas de la espada!". (Ezequiel 32, 21)

  • comerán la carne de guerreros valerosos y beberán la sangre de príncipes de la tierra: carneros, corderos, chivos y toros, engordados todos ellos en Basán. (Ezequiel 39, 18)

  • En mi mesa, ustedes se saciarán de caballos y jinetes, de guerreros valerosos y soldados de todas clases -oráculo del Señor-. (Ezequiel 39, 20)

  • Ustedes han arado la maldad, han cosechado la injusticia, han comido el fruto de la mentira. Porque has confiado en tu poderío, en la multitud de tus guerreros, (Oseas 10, 13)

  • Se abalanzan como valientes, como guerreros escalan las murallas. Cada uno avanza hacia adelante y no se entrecruzan sus caminos. (Joel 2, 7)

  • El escudo de sus valientes está enrojecido, sus guerreros visten de púrpura; los carros relucen con el fuego de los aceros mientras se los dispone para el combate; y los conductores se enardecen. (Nahún 2, 4)


“Resigna-te a ser neste momento uma pequena abelha. E enquanto esperas ser uma grande abelha, ágil, hábil, capaz de fabricar bom mel, humilha-te com muito amor perante Deus e os homens, pois Deus fala aos que se mantêm diante dele humildemente”. São Padre Pio de Pietrelcina