Löydetty 327 Tulokset: oposición a los judíos
El rey llamó entonces en su auxilio a los judíos, que se juntaron todos en torno a él y luego se diseminaron por la ciudad. Aquel día llegaron a matar hasta 100.000. (I Macabeos 11, 47)
Cuando los de la ciudad vieron que los judíos dominaban la ciudad a su talante, perdieron el ánimo y levantaron sus clamores al rey suplicándole: (I Macabeos 11, 49)
«Danos la mano y cesen los judíos en sus ataques contra nosotros y contra la ciudad.» (I Macabeos 11, 50)
Depusieron las armas e hicieron la paz. Los judíos alcanzaron gran gloria ante el rey y ante todos los de su reino y se volvieron a Jerusalén con un rico botín. (I Macabeos 11, 51)
Se fueron, pues, a Roma y entrando en el Senado dijeron: «Jonatán, sumo sacerdote, y la nación de los judíos nos han enviado para que se renueve con ellos la amistad y la alianza como antes.» (I Macabeos 12, 3)
Se ha encontrado un documento relativo a espartanos y judíos de que son hermanos y que son de la raza de Abraham. (I Macabeos 12, 21)
«El rey Demetrio saluda a Simón, sumo sacerdote y amigo de reyes, a los ancianos y a la nación de los judíos. (I Macabeos 13, 36)
y el pueblo comenzó a escribir en las actas y contratos: «En el año primero de Simón, gran sumo sacerdote, estratega y hegumeno de los judíos. (I Macabeos 13, 42)
Esta es la copia de la carta enviada por los espartanos: «Los magistrados y la ciudad de los espartanos saludan al sumo sacerdote Simón, a los ancianos, a los sacerdotes y al resto del pueblo de los judíos, nuestros hermanos. (I Macabeos 14, 20)
Hemos registrado sus declaraciones entre las decisiones del pueblo en estos términos: Numenio, hijo de Antíoco, y Antípatros, hijo de Jasón, embajadores de los judíos, se nos han presentado para renovar la amistad con nosotros. (I Macabeos 14, 22)
Quisieron los enemigos de los judíos invadir el país para devastarlo y llevar su mano contra el Lugar Santo. (I Macabeos 14, 31)
Fortificó las ciudades de Judea y Bet Sur, ciudad fronteriza de Judea, donde se encontraban antes las armas de los enemigos, y puso en ella una guarnición de guerreros judíos. (I Macabeos 14, 33)