Löydetty 335 Tulokset: reyes
El resto de los hechos de Amasías, los primeros y los postreros, ¿no están escritos en el libro de los reyes de Judá y de Israel? (II Crónicas 25, 26)
Acostose Ozías con sus padres y lo sepultaron con sus padres en el campo de los sepuclros de los reyes, porque decían: «Es un leproso.» En su lugar reinó su hijo Jotam. (II Crónicas 26, 23)
El resto de los hechos de Jotam, todas sus guerras y sus obras, están escritos en el libro de los reyes de Israel y de Judá. (II Crónicas 27, 7)
Siguió los caminos de los reyes de Israel, llegando a fundir estatuas para los Baales. (II Crónicas 28, 2)
En aquel tiempo el rey Ajaz envió mensajeros a los reyes de Asiria para que le socorriesen. (II Crónicas 28, 16)
Ofrecía sacrificios a los dioses de Damasco que le habían derrotado, pues se decía: «Los dioses de los reyes de Aram les ayudan a ellos; les ofreceré sacrificios, y me ayudarán a mí.» Ellos fueron la causa de su ruina y de la de todo Israel. (II Crónicas 28, 23)
El resto de sus hechos y todas sus obras, las primeras y las postreras, está escrito en el libro de los reyes de Judá e Israel. (II Crónicas 28, 26)
Se acostó Ajaz con sus padres y lo sepultaron dentro de la Ciudad, en Jerusalén: pues no le colocaron en los sepulcros de los reyes de Israel. En su lugar reinó su hijo Ezequías. (II Crónicas 28, 27)
Los correos, con las cartas del rey y de sus jefes, recorrieron todo Israel y Judá, como el rey lo había mandado y decían: «Hijos de Israel, volveos a Yahveh, el Dios de Abraham, de Isaac y de Israel, y él se volverá al resto que ha quedado de vosotros, los que han escapado de la mano de los reyes de Asiria. (II Crónicas 30, 6)
Juntóse mucha gente, y cegaron todas las fuentes y el arroyo que corría por medio de la región, diciendo: «Cuando vengan los reyes de Asiria, ¿por qué han de hallar tanta agua?» (II Crónicas 32, 4)
El resto de los hechos de Ezequías y sus obras piadosas están escritos en las visiones del profeta Isaías, hijo de Amós, y en el libro de los reyes de Judá y de Israel. (II Crónicas 32, 32)
El resto de los hechos de Manasés, su oración a Dios, y las palabras de los videntes que le hablaron en nombre de Yahveh, Dios de Israel, se encuentran escritos en los Hechos de los reyes de Israel. (II Crónicas 33, 18)