Löydetty 205 Tulokset: Oído

  • ¿Quién de vosotros presta oído a esto, está atento y lo guarda para el porvenir? (Isaías 42, 23)

  • Lo has oído, has visto todo esto, ¿no lo vas a admitir? Ahora te anuncio cosas nuevas, ocultas y desconocidas; (Isaías 48, 6)

  • acaban de ser creadas ahora mismo, sin que antes las hubieras oído, para que no puedas decir: Ya lo sabía. (Isaías 48, 7)

  • No lo has oído, ni lo conocías, tu oído aún no se había abierto, pues yo sabía que eres pérfido y que te llamas rebelde desde el vientre de tu madre. (Isaías 48, 8)

  • De nuevo te dirán al oído tus hijos, que creías perdidos: Este lugar es muy estrecho para mí, hazme sitio donde pueda habitar. (Isaías 49, 20)

  • El Señor Dios me ha dado una lengua de experto para que yo sepa responder al cansado. Cada mañana me despierta el oído para escuchar como un discípulo. (Isaías 50, 4)

  • El Señor Dios me ha abierto el oído y yo no he resistido, no me he echado atrás. (Isaías 50, 5)

  • Prestad oído y venid a mí; escuchad y vivirá vuestra alma. Haré con vosotros un pacto eterno, según la fiel promesa que hice a David. (Isaías 55, 3)

  • No, la mano del Señor no es demasiado corta para salvar, ni su oído tan duro como para no oír; (Isaías 59, 1)

  • de las que nadie jamás había sabido! Ni oído alguno oyó, ni ojo alguno vio jamás, fuera de ti, un Dios que hiciera tanto con quien confía en él. (Isaías 64, 3)

  • Les daré una señal y mandaré a algunos de sus supervivientes a los pueblos de Tarsis, Etiopía, Libia, Mosoc, Ros, Tubal y Yaván; a las islas lejanas, que no han oído hablar de mí ni han visto mi gloria. Ellos publicarán mi gloria entre los pueblos. (Isaías 66, 19)

  • ¡Ay, mis entrañas, mis entrañas! ¡Cómo sufro! ¡Entretelas de mi corazón! El corazón se me salta; ya no puedo callarme porque he oído el sonido del clarín, el clamor de guerra. (Jeremías 4, 19)


“O passado não conta mais para o Senhor. O que conta é o presente e estar atento e pronto para reparar o que foi feito.” São Padre Pio de Pietrelcina