Löydetty 528 Tulokset: camino recto

  • Pues estoy seguro que después de mi muerte os pervertiréis y os alejaréis del camino que yo os tengo prescrito, y que la desgracia os alcanzará en el futuro por haber hecho lo malo a los ojos del Señor, irritándole con vuestra conducta". (Deuteronomio 31, 29)

  • Él es la roca, sus obras son perfectas, todos sus caminos son la justicia misma; el Dios fiel, en él no hay maldad; es justo y recto. (Deuteronomio 32, 4)

  • Los enviados del rey marcharon en su persecución camino del Jordán, hacia los vados, y se cerró la puerta después que salieron los que iban en su persecución. (Josué 2, 7)

  • Y les dijo: "Id hacia la montaña, para que no os encuentren los que os persiguen; estad escondidos allí durante tres días, hasta que ellos regresen, y luego seguid vuestro camino". (Josué 2, 16)

  • Pero entre ella y vosotros guardad una distancia de un kilómetro; no os acerquéis a ella. Así sabréis por dónde tenéis que ir, pues vosotros no habéis pasado nunca por este camino". (Josué 3, 4)

  • La razón por la cual Josué hizo esta circuncisión es ésta: toda la población masculina que salió de Egipto en edad de llevar las armas había muerto en el desierto durante el camino después de la salida de Egipto. (Josué 5, 4)

  • Los que salieron de Egipto estaban circuncidados, pero los que nacieron en el desierto durante el camino, después de la salida de Egipto, no lo estaban; (Josué 5, 5)

  • Y en su lugar suscitó a sus hijos; a éstos los circuncidó Josué, porque estaban incircuncisos, ya que no habían sido circuncidados durante el camino. (Josué 5, 7)

  • Josué y todo Israel se fingieron vencidos por ellos y se dieron a la fuga por el camino del desierto. (Josué 8, 15)

  • recurrieron por su parte a la estratagema. Se pusieron en camino, con provisiones, y colocaron sobre sus asnos sacos viejos y odres viejos de vino, rotos y remendados. (Josué 9, 4)

  • Entonces nuestros ancianos y todos los habitantes de nuestra tierra nos dijeron: Tomad con vosotros víveres para el camino, id a su encuentro y decidles: Somos siervos vuestros, haced un pacto con nosotros. (Josué 9, 11)

  • porque el Señor es nuestro Dios; él nos sacó a nosotros y a nuestros padres de Egipto, de la casa de la esclavitud; ha realizado ante nuestros ojos estos grandes prodigios y nos ha protegido durante todo el camino que hemos recorrido y en todos los pueblos por los que hemos pasado. (Josué 24, 17)


O Pai celeste está sempre disposto a contentá-lo em tudo o que for para o seu bem”. São Padre Pio de Pietrelcina