Löydetty 181 Tulokset: hablar

  • Islas, guardad silencio ante mí; renovad, pueblos, vuestras fuerzas. Adelantaos para hablar, comparezcamos juntos en juicio. (Isaías 41, 1)

  • ser unos traidores, olvidarnos del Señor, apostatar de nuestro Dios, hablar de opresión y de rebelión, tramar planes para engañar a los demás. (Isaías 59, 13)

  • No se oirá hablar más de violencia en tu país, ni de opresión y ruina en tus confines; a tus muros llamarás salvación, a tus puertas alabanza. (Isaías 60, 18)

  • Les daré una señal y mandaré a algunos de sus supervivientes a los pueblos de Tarsis, Etiopía, Libia, Mosoc, Ros, Tubal y Yaván; a las islas lejanas, que no han oído hablar de mí ni han visto mi gloria. Ellos publicarán mi gloria entre los pueblos. (Isaías 66, 19)

  • Yo dije: "¡Ah, Señor Dios, mira que yo no sé hablar; soy joven!". (Jeremías 1, 6)

  • Yo haré venir sobre vosotros una nación de muy lejos, oh casa de Israel -dice el Señor-; una nación invencible, una nación muy antigua, una nación cuya lengua desconoces y cuyo hablar no comprendes. (Jeremías 5, 15)

  • ¿A quién he de hablar? ¿A quién conjurar para que escuche? Ved, su oído está incircunciso, no pueden escuchar. Ved, la palabra del Señor es para ellos objeto de irrisión; han perdido su gusto. (Jeremías 6, 10)

  • y Sedecías, rey de Judá, no escapará de las manos de los caldeos, sino que caerá sin remedio en manos del rey de Babilonia, que podrá hablar con él cara a cara y sus ojos verán los ojos de él, (Jeremías 32, 4)

  • Esto dice el Señor, Dios de Israel: Vete a hablar a Sedecías, rey de Judá, y dile: Esto dice el Señor: Voy a entregar esta ciudad en manos del rey de Babilonia, que la prenderá fuego. (Jeremías 34, 2)

  • No se oyó hablar de ella en Canaán, ni fue vista en Temán. (Baruc 3, 22)

  • Porque la lengua de esos dioses ha sido limada por el artífice y ellos, por más dorados y plateados que estén, son pura farsa y no pueden hablar. (Baruc 6, 7)

  • Los mismos caldeos los desacreditan: cuando ven a un mudo que no puede hablar, se lo presentan a Bel, pidiéndole que le haga hablar; ¡como si este dios pudiera oír! (Baruc 6, 40)


“Esforce-se, mesmo se for um pouco, mas sempre…” São Padre Pio de Pietrelcina