Löydetty 89 Tulokset: venta de esclavos

  • Porque somos esclavos, pero nuestro Dios no nos ha desamparado en nuestra esclavitud; antes bien, nos ha granjeado el favor de los reyes de Persia, nos ha dado un respiro para reconstruir el templo de nuestro Dios y restaurar sus ruinas y nos ha procurado un refugio seguro en Judá y en Jerusalén. (Esdras 9, 9)

  • sin contar sus esclavos y esclavas, que eran siete mil trescientos treinta y siete, más doscientos cuarenta y cinco cantores y cantoras. (Nehemías 7, 67)

  • Y ahora nosotros mismos somos esclavos; y en la tierra que tú diste a nuestros padres para que gozaran de sus frutos y sus bienes, en ella misma estamos sometidos a esclavitud. (Nehemías 9, 36)

  • Los hombres y sus esposas, sus hijos, incluso pequeñitos; sus animales, los forasteros, los jornaleros y los esclavos, se pusieron cilicios sobre sus cuerpos. (Judit 4, 10)

  • El rey de Egipto les forzó a hacer ladrillos, los humilló y redujo a la condición de esclavos. (Judit 5, 11)

  • Mejor es para nosotros ser su botín. Seremos sus esclavos; pero viviremos y no veremos morir a nuestros niños ni perecer a nuestras mujeres y jóvenes. (Judit 7, 27)

  • Pero entregaste a sus jefes a la matanza y su lecho, que presenció su ignominia, al engaño y a la sangre; castigaste a los esclavos juntamente con los poderosos, y a éstos en sus tronos; (Judit 9, 3)

  • Llegaron a la tienda de Holofernes y dijeron a su ayudante: "Despierta a nuestro jefe, pues los esclavos se han atrevido a bajar a luchar contra nosotros para su ruina total". (Judit 14, 13)

  • pues yo y mi pueblo estamos condenados al exterminio, a la matanza, al aniquilamiento. Si al menos se hubiese tratado de vendernos como esclavos o esclavas, callaría; pero el enemigo no podrá compensar los daños al rey". (Ester 7, 4)

  • Has vendido a tu pueblo a bajo precio, no has ganado nada con su venta; (Salmos 44, 13)

  • Se hicieron luego esclavos de Baal Fegor, comieron los sacrificios de los muertos; (Salmos 106, 28)

  • Los mercaderes del país, al conocer su llegada, se presentaron en el campamento con mucha plata, oro y criados para comprar como esclavos a los israelitas. Se le unieron también fuertes contingentes de Idumea y del territorio de los filisteos. (I Macabeos 3, 41)


“Faltar com a caridade¨¦ como ferir a pupila dos olhos de Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina