20. Aquí cerca hay una ciudad -es una población insignificante- donde podré refugiarme. Deja que me quede en ella, ya que es tan pequeña, y así estaré a salvo".





“Há duas razões principais para se orar com muita satisfação: primeiro para render a Deus a honra e a glória que Lhe são devidas. Segundo, para falar com São Padre Pio de Pietrelcina