I Reyes, 9

18. Baalat y Tamar en el desierto del país,

Aiheeseen liittyvät säkeet I Reyes, 9:

1 Kings 9 le dice la respuesta del Señor a Salomón después de la finalización de la construcción del templo y el palacio. El capítulo trata principalmente del pacto entre Dios y Salomón, así como el cumplimiento de las promesas que Dios hizo a David. Además, también menciona la relación comercial entre Salomón y Hiram, Rey de Tire.

2 Crónicas 7:14: "Si mi pueblo, que se llama por mi nombre, se humillan, reza y persigue mi rostro y se aleja de sus caminos malvados, del cielo lo escucharé, perdonará su pecado y sanaré su tierra". Este versículo habla del pacto entre Dios y Salomón, y señala que si las personas se humillan, rezan y buscan la cara de Dios, él escuchará y perdonará sus pecados.

Salmo 72:10: "Que los reyes de Tarshis y las regiones costeras les traigan homenaje; que los reyes de Sabbath y Sebá le ofrezcan regalos". Este versículo se relaciona con la relación comercial entre Salomón y Hiram, y señala que otros reyes deben ofrecer impuestos y obsequios a Salomón como una forma de respeto y admiración.

Isaías 2:4: "Él juzgará entre las naciones y resolverá la lucha de muchos pueblos. De sus espadas aradas, y sus lanzas, hoces. Una nación ya no elevará la espada contra otra, ya no se dedicarán a la guerra " Este versículo se relaciona con el pacto entre Dios y Salomón, que garantizaba la paz y la prosperidad a Israel durante su reinado.

1 Reyes 3:11: "Y Dios le dijo:" Dado que me pidió una larga vida o una riqueza, ni pidió la muerte de sus enemigos, pero discernimiento para gobernar con justicia, haré lo que él pidió , dándole un corazón sabio y capaz de discernir entre el bien y el mal ". Este versículo destaca la sabiduría que Salomón recibió de Dios para gobernar con justicia.

2 Samuel 7:12-13: "Cuando tus días hayan terminado y descanses con tus antepasados, estableceré a tu descendiente para sucederte, quién saldrá de tu propio cuerpo y firmará tu reino. Él construirá un templo En honor por mi nombre, y estableceré el trono de tu reino para siempre ". Este versículo destaca el cumplimiento de las promesas de Dios a David, que se cumplieron durante el reinado de Salomón.