14. Tomó todo el oro, toda la plata y todos los objetos que se hallaban en la Casa de Yahveh, los tesoros de la casa del rey y también rehenes, y se volvió a Samaría.





“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina