Sabiduría, 18
12. Todos sin excepción tenían muertos innumerables, heridos por un mismo género de muerte; y los vivos no bastaban para enterrarlos, ya que, en un instante, lo más noble de su linaje había sido destruido.
12. Todos sin excepción tenían muertos innumerables, heridos por un mismo género de muerte; y los vivos no bastaban para enterrarlos, ya que, en un instante, lo más noble de su linaje había sido destruido.
“Diga ao Senhor: Faça em mim segundo a Tua vontade, mas antes de mandar-me o sofrimento, dê-me forças para que eu possa sofrer com amor.”. São Padre Pio de Pietrelcina