2. Destruyeron los altares levantados por los extranjeros en las plazas, así como en los recintos sagrados. Purificado el Templo, hicieron otro altar y, después de sacar fuego del pedernal, ofrecieron sacrificios





“É sempre necessário ir para a frente, nunca para trás, na vida espiritual. O barco que pára em vez de ir adiante é empurrado para trás pelo vento.” São Padre Pio de Pietrelcina