Trouvé 359 Résultats pour: Tributo del Templo

  • En mi angustia clamé a Yavé, invoqué a mi Dios, desde su templo oyó mi voz, y mi clamor llegó a sus oídos. (2 Samuel 22, 7)

  • Salomón dominaba todos los reinos desde el río Eufrates hasta el país de los filisteos y hasta la frontera de Egipto. Todos le pagaban tributo, y le estuvieron sometidos durante su vida. (1 Reyes 4, 21)

  • La galería inferior tenía dos metros y medio de ancho, la intermedia tenía tres, y la tercera tres metros y medio de ancho, porque fue rebajando alrededor del templo, por la parte exterior, para no empotrar las vigas en las paredes de la Casa. (1 Reyes 6, 6)

  • Asentó las columnas junto al vestíbulo del templo, (1 Reyes 7, 20)

  • las cucharas, los cuchillos y los calderos pequeños, las copas y los braseros de oro fino, las bisagras de oro para las puertas del «Lugar Santísimo» y del Templo. (1 Reyes 7, 50)

  • Levantó un altar para Baal en el templo de Baal que construyó en su capital, Samaria. (1 Reyes 16, 32)

  • Solamente acompañaré a mi rey cuando vaya al templo de su dios Rimón. El se apoya en mi brazo, y yo me postraré con él; que Yavé me perdone esto.» (2 Reyes 5, 18)

  • Jehú, por su parte, envió mensajeros por todo Israel para que vinieran todos los fieles de Baal sin que faltara ni uno solo. Cuando estuvieron en el templo de Baal, había tanta gente que casi no tocaban tierra. (2 Reyes 10, 21)

  • Derribaron el altar y demolieron el templo, que ha pasado a ser un terreno para tirar la basura, hasta el día de hoy. (2 Reyes 10, 27)

  • Todos los ciudadanos fueron al templo de Baal y lo destruyeron. Rompieron los altares y las imágenes y mataron a Matán, sacerdote de Baal, delante de su altar. (2 Reyes 11, 18)

  • Un día que estaba arrodillado en el templo de su dios Nisroc, sus hijos Adrammélec y Saréser lo asesinaron a puñaladas y luego se pusieron a salvo en el país de Ararat. Le sucedió en el trono su hijo Asarjadón. (2 Reyes 19, 37)

  • Josías hizo también desaparecer todos los santuarios de las lomas de las ciudades de Samaria. Estos santuarios habían sido hechos por los reyes de Israel y solamente consiguieron el enojo de Yavé. El rey los derribó e hizo con ellos igual que con el templo de Betel. (2 Reyes 23, 19)


“Quando ofendemos a justiça de Deus, apelamos à Sua misericórdia. Mas se ofendemos a Sua misericórdia, a quem podemos apelar? Ofender o Pai que nos ama e insultar quem nos auxilia é um pecado pelo qual seremos severamente julgados.” São Padre Pio de Pietrelcina