Trouvé 324 Résultats pour: campo de batalla

  • Rodean a Jerusalén como los guardianes de un campo, porque ella se ha rebelado contra mí -oráculo del Señor-. (Jeremías 4, 17)

  • Empuñan el arco y la jabalina, son crueles y despiadados, su voz resuena como el mar, van montados a caballo, dispuestos como un solo hombre para la batalla contra ti, hija de Sión. (Jeremías 6, 23)

  • ¡No salgan al campo, no vayan por el camino, porque el enemigo tiene una espada, reina el terror por todas partes! (Jeremías 6, 25)

  • Ellos son como un espantapájaros, en un campo de pepinos; no pueden hablar, hay que transportarlos, porque no dan ni un paso. ¡No les tengan miedo, no hacen ningún mal, ni tampoco son capaces de hacer el bien! (Jeremías 10, 5)

  • ¿Hasta cuándo el país estará de duelo y se secará toda la hierba del campo? Por la maldad de los que habitan en él perecen las bestias y los pájaros. Porque ellos dicen: "¡Él no ve nuestros senderos!". (Jeremías 12, 4)

  • Mi herencia es un pájaro multicolor, asediado por las aves de rapiña. ¡Vayan, reúnanse, todas las fieras del campo, vengan a devorar! (Jeremías 12, 9)

  • Sí, hasta la cierva en el campo, deja abandonadas sus crías, por falta de pasto; (Jeremías 14, 5)

  • Si salgo al campo abierto, veo las víctimas de la espada; si entro en la ciudad, veo los sufrimientos del hambre. Sí, hasta el profeta y el sacerdote recorren el país y no logran comprender. (Jeremías 14, 18)

  • en las montañas y en campo abierto. Tu riqueza, todos tus tesoros los entregaré como botín, gratuitamente, por todos tus pecados, en todo tu territorio. (Jeremías 17, 3)

  • "Miqueas de Moréset profetizó en los días de Ezequías, rey de Judá, y dijo a todo el pueblo de Judá: Así habla el Señor de los ejércitos: Sión será un campo arado, Jerusalén, un montón de ruinas, y la montaña del Templo, una altura boscosa. (Jeremías 26, 18)

  • Ahora, yo entregué todos estos países en manos de Nabucodonosor, rey de Babilonia, mi servidor; hasta los animales del campo se los di para que lo sirvan. (Jeremías 27, 6)

  • Porque así habla el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: Yo he puesto un yugo de hierro sobre todas estas naciones, para que sirvan a Nabucodonosor, rey de Babilonia, y ellas lo servirán; hasta los animales del campo se los he dado". (Jeremías 28, 14)


“Diga ao Senhor: Faça em mim segundo a Tua vontade, mas antes de mandar-me o sofrimento, dê-me forças para que eu possa sofrer com amor.”. São Padre Pio de Pietrelcina