Trouvé 385 Résultats pour: desierto de Sinaí

  • Vuestra madre está llena de vergüenza, confundida la que os dio a luz. Vedla, la última de las naciones, desierto, aridez, estepa. (Jeremías 50, 12)

  • Tiembla la tierra y se estremece, porque se cumple el decreto del Señor contra Babilonia: reducir el país de Babilonia a un desierto despoblado. (Jeremías 51, 29)

  • Sus ciudades se han convertido en un desierto, en tierra árida, en estepa; nadie ya vivirá allí, ni un alma volverá a pasar por ella. (Jeremías 51, 43)

  • Y dirás: ¡Señor! Tú mismo has sentenciado que este lugar será destruido y que nadie lo volverá a habitar; ni hombre, ni bestia, sino que será un perpetuo desierto. (Jeremías 51, 62)

  • Hasta los chacales presentan las ubres, dan de mamar a sus cachorros; las hijas de mi pueblo se han hecho crueles como las avestruces del desierto. (Lamentaciones 4, 3)

  • Nuestros perseguidores eran más veloces que las águilas del cielo; por los montes nos acosaban, en el desierto nos tendían emboscadas. (Lamentaciones 4, 19)

  • Arriesgando la vida nos buscamos el pan, ante la espada del desierto. (Lamentaciones 5, 9)

  • haré desaparecer de las ciudades de Judá y de Jerusalén el canto de alegría y de alborozo, el canto del esposo y de la esposa, y todo el país quedará hecho un desierto, sin habitantes". (Baruc 2, 23)

  • Te reduciré a un desierto, a objeto de vergüenza entre las naciones que te rodean, a los ojos de todos los que pasen. (Ezequiel 5, 14)

  • Extenderé mi mano sobre ellos y dejaré su tierra desierta y desolada, desde el desierto hasta Ribla, dondequiera que habiten, y sabrán que yo soy el Señor". (Ezequiel 6, 14)

  • Y si yo hiciese venir contra este país animales dañinos que lo asolaran y redujeran a un desierto que nadie se atreviera a cruzar por miedo a las fieras, (Ezequiel 14, 15)

  • y se encontraran allí esos tres hombres, lo juro, dice el Señor Dios, que ni a sus hijos ni a sus hijas salvarían; sólo se salvarían ellos, y el país quedaría igualmente convertido en un desierto. (Ezequiel 14, 16)


“Ouço interiormente uma voz que constantemente me diz: Santifique-se e santifique!” São Padre Pio de Pietrelcina