16. Tomó todas las grasas que envuelven las entrañas, la sabanilla que recubre el hígado y los dos riñones con sus grasas, y los quemó sobre el altar.





“Sejam como pequenas abelhas espirituais, que levam para sua colméia apenas mel e cera. Que, por meio de sua conversa, sua casa seja repleta de docilidade, paz, concórdia, humildade e piedade!” São Padre Pio de Pietrelcina