8. Pero si de veras me estimas, si realmente quiere el rey escuchar mi petición y concederme lo que yo deseo, le ruego que mañana vuelva a venir a cenar junto con Amán, y entonces te diré qué es lo que quiero.»





“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina