Talált 905 Eredmények: cuarenta años en el desierto

  • Esta es hija de Abraham, y Satanás la mantenía atada desde hace dieciocho años; ¿no se la debía desatar precisamente en día sábado?» (Evangelio según San Lucas 13, 16)

  • «Si alguno de ustedes pierde una oveja de las cien que tiene, ¿no deja las otras noventa y nueve en el desierto y se va en busca de la que se le perdió, hasta que la encuentra? (Evangelio según San Lucas 15, 4)

  • Pero él le contestó: «Hace tantos años que te sirvo sin haber desobedecido jamás ni una sola de tus órdenes, y a mí nunca me has dado un cabrito para hacer una fiesta con mis amigos. (Evangelio según San Lucas 15, 29)

  • Juan contestó: «Yo soy, como dijo el profeta Isaías, la voz que grita en el desierto: Enderecen el camino del Señor.» (Evangelio según San Juan 1, 23)

  • Ellos contestaron: «Han demorado ya cuarenta y seis años en la construcción de este templo, y ¿tú piensas reconstruirlo en tres días?» (Evangelio según San Juan 2, 20)

  • Recuerden la serpiente que Moisés hizo levantar en el desierto: así también tiene que ser levantado el Hijo del Hombre, (Evangelio según San Juan 3, 14)

  • Había allí un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba enfermo. (Evangelio según San Juan 5, 5)

  • Nuestros antepasados comieron el maná en el desierto, según dice la Escritura: Se les dio a comer pan del cielo.» (Evangelio según San Juan 6, 31)

  • Sus antepasados comieron el maná en el desierto, pero murieron: (Evangelio según San Juan 6, 49)

  • Entonces los judíos le dijeron: «¿Aún no tienes cincuenta años y has visto a Abrahán?» (Evangelio según San Juan 8, 57)

  • Jesús ya no podía moverse libremente como quería entre los judíos. Se retiró, pues, a la región cercana al desierto y se quedó con sus discípulos en una ciudad llamada Efraín. (Evangelio según San Juan 11, 54)

  • De hecho, se presentó a ellos después de su pasión, y les dio numerosas pruebas de que vivía. Durante cuarenta días se dejó ver por ellos y les habló del Reino de Dios. (Hecho de los Apóstoles 1, 3)


A firmeza de todo o edifício depende da fundação e do teto! São Padre Pio de Pietrelcina