Talált 825 Eredmények: dioses de Egipto

  • Jacob entonces bajó a Egipto, donde murió él, y más tarde también nuestros padres. (Hecho de los Apóstoles 7, 15)

  • Ya se iba acercando el tiempo de la promesa que Dios había hecho a Abrahán; el pueblo creció y se multiplicó en Egipto, (Hecho de los Apóstoles 7, 17)

  • hasta que llegó otro rey a Egipto que no había conocido a José. (Hecho de los Apóstoles 7, 18)

  • He visto cómo maltratan a mi pueblo en Egipto, he oído su llanto y he bajado para liberarlo. Y ahora ven, que te voy a enviar a Egipto.» (Hecho de los Apóstoles 7, 34)

  • Y los hizo salir de aquel país, realizando prodigios y señales en Egipto, en el mar Rojo y en el desierto durante cuarenta años. (Hecho de los Apóstoles 7, 36)

  • Nuestros padres no quisieron obedecerle, lo rechazaron y pensaron volverse a Egipto. (Hecho de los Apóstoles 7, 39)

  • Incluso dijeron a Aarón: "Danos dioses que vayan delante de nosotros, porque no sabemos qué ha sido de este Moisés que nos sacó de Egipto." (Hecho de los Apóstoles 7, 40)

  • El Dios de Israel, nuestro pueblo, eligió a nuestros padres. Hizo que el pueblo se multiplicara durante su permanencia en Egipto, los sacó de allí con hechos poderosos, (Hecho de los Apóstoles 13, 17)

  • Al ver la gente lo que Pablo había hecho, comenzó a gritar en la lengua de Licaonia: «¡Los dioses han venido a nosotros en forma de hombres!» (Hecho de los Apóstoles 14, 11)

  • Algunos filósofos epicúreos y estoicos entablaron conversación con él. Unos preguntaban: «¿Qué querrá decir este charlatán?», mientras otros comentaban: «Parece ser un predicador de dioses extranjeros.» Porque le oían hablar de «Jesús» y de «la Resurrección». (Hecho de los Apóstoles 17, 18)

  • Pero como ustedes mismos pueden ver y oír, ese Pablo ha cambiado la mente de muchísimas personas, no sólo en Efeso, sino en casi toda la provincia de Asia. Según él, los dioses no pueden salir de manos humanas. (Hecho de los Apóstoles 19, 26)

  • Ciertamente la gente habla de dioses en el cielo o en la tierra, y en ese sentido hay muchos dioses y señores. (1º Carta a los Corintios 8, 5)


“A maior alegria de um pai é que os filhos se amem, formem um só coração e uma só alma. Não fostes vós que me escolhestes, mas o pai celeste que, na minha primeira missa, me fez ver todos os filhos que me confiava”.(P.e Pio) São Padre Pio de Pietrelcina