Talált 287 Eredmények: doce tribus

  • Contó unos ciento veinte mil hombres escogidos para la guerra, y doce mil arqueros a caballo, a los que formó en orden de batalla. (Judit 2, 15)

  • Pero él destruyó sus templos, cortó los árboles de sus bosques sagrados y destruyó todas las divinidades para que los hombres de todas las lenguas y todas las tribus adoraran solamente a Nabucodonosor y lo proclamaran dios. (Judit 3, 8)

  • Ese mismo día su ejército se puso en marcha. El número de guerreros era de ciento veinte mil de infantería y doce mil jinetes, sin contar los encargados del equipaje y la gran cantidad de hombres que iba a pie con ellos. (Judit 7, 2)

  • Cada joven debía presentarse por turno ante el rey, después de haberse preparado durante doce meses, como estaba establecido para las mujeres. En los primeros seis meses de esta preparación, las jóvenes debían usar en su tocador aceite de mirra, y en otros seis, perfumes y cremas propios de las mujeres. (Ester 2, 12)

  • Según él, mezclado con las diversas tribus de la tierra, se halla un pueblo que es enemigo de todos, cuyas leyes son contrarias a las de las otras naciones y que constantemente está desobedeciendo nuestras disposiciones, de tal manera que impide que podamos gobernar como conviene para el bien de todos. (Ester 13, 4)

  • Expulsó en su presencia a las naciones, les asignó a cordel una heredad y en carpas ajenas instaló a las tribus de Israel. (Salmos 78, 55)

  • Ríndanle al Señor tribus y pueblos, ríndanle al Señor gloria y poder, (Salmos 96, 7)

  • Hizo salir a los suyos con oro y plata, y en sus tribus ninguno iba cojeando. (Salmos 105, 37)

  • Allá suben las tribus, las tribus del Señor, la asamblea de Israel, para alabar el Nombre del Señor. (Salmos 122, 4)

  • Alejandro había reinado doce años cuando murió. (1 Macabeos 1, 7)

  • De común acuerdo, decidieron conmemorar aquella fecha y se fijó como día festivo el día trece del mes doce, llamado Adar en arameo, la víspera del día de Mardoqueo. (2 Macabeos 15, 36)

  • Reúne a todas las tribus de Jacob y entrégales como al comienzo su heredad. (Sirácides (Eclesiástico) 36, 10)


“É loucura fixar o olhar no que rapidamente passa”. São Padre Pio de Pietrelcina