Talált 102 Eredmények: Animal

  • Si su ofrenda es un holocausto de ganado mayor, deberá presentar un animal macho y sin ningún defecto. Lo llevará a la entrada de la Carpa del Encuentro, para que sea aceptado por el Señor, (Levítico 1, 3)

  • Si su ofrenda para el holocausto pertenece al ganado menor -corderos o cabras- deberá ofrecer un animal macho y sin defecto. (Levítico 1, 10)

  • Dividirá el animal en dos mitades, dejando un ala de cada lado, pero sin separarlas. Finalmente, el sacerdote lo hará arder sobre la leña encendida: es un holocausto, una ofrenda que se quema con aroma agradable al Señor. (Levítico 1, 17)

  • Si una persona ofrece un sacrificio de comunión y su ofrenda pertenece al ganado mayor -sea macho o hembra- deberá presentar delante del Señor un animal sin defecto. (Levítico 3, 1)

  • Si su ofrenda para el sacrificio de comunión pertenece al ganado menor -sea macho o hembra- deberá ofrecer al Señor un animal sin defecto. (Levítico 3, 6)

  • impondrá su mano sobre la cabeza del animal ofrecido, y lo inmolará delante de la Carpa del Encuentro. Luego los hijos de Aarón rociarán con su sangre todos los costados del altar. (Levítico 3, 8)

  • Impondrá su mano sobre la cabeza del animal y lo inmolará en el lugar donde se inmolan las víctimas para el holocausto, delante del Señor: es un sacrificio por el pecado. (Levítico 4, 24)

  • Después quitará toda la grasa del animal, como se quita la grasa del cordero en los sacrificios de comunión, y la hará arder sobre el altar, junto con las ofrendas que se queman para el Señor. De esta manera, el sacerdote practicará el rito de expiación en favor de esa persona, por el pecado que cometió, y así será perdonada. (Levítico 4, 35)

  • o bien, toca alguna cosa impura -ya sea el cadáver de una bestia salvaje impura, de un animal doméstico impuro, o de un reptil impuro- volviéndose, sin darse cuenta, impuro y culpable; (Levítico 5, 2)

  • Los llevará al sacerdote, que ofrecerá en primer lugar la víctima destinada al sacrificio por el pecado. Apretará con las uñas el cuello del animal, pero no le arrancará la cabeza; (Levítico 5, 8)

  • Si una persona toca algo impuro -ya sea un hombre que se encuentra en estado de impureza o un animal impuro o cualquier otra cosa impura- y a pesar de ello, come carne de un sacrificio de comunión ofrecido al Señor, será excluida de su pueblo. (Levítico 7, 21)

  • La grasa de un animal muerto o despedazado por las fieras podrá servir para cualquier uso, pero no deberán comerla. (Levítico 7, 24)


“Deus não opera prodígios onde não há fé.” São Padre Pio de Pietrelcina