Talált 453 Eredmények: justicia divina

  • ¿Corren por la roca los caballos? ¿se ara con bueyes el mar? ¡pues vosotros trocáis en veneno el juicio y en ajenjo el fruto de la justicia! (Amós 6, 12)

  • La cólera de Yahveh soportaré, ya que he pecado contra él, hasta que él juzgue mi causa y ejecute mi juicio; él me sacará a la luz, y yo contemplaré su justicia. (Miqueas 7, 9)

  • Buscad a Yahveh, vosotros todos, humildes de la tierra, que cumplís sus normas; buscad la justicia, buscad la humildad; quizá encontréis cobijo el Día de la cólera de Yahveh. (Sofonías 2, 3)

  • voy a traerlos para que moren en medio de Jerusalén. Y serán mi pueblo y yo seré su Dios con fidelidad y con justicia. (Zacarías 8, 8)

  • Se sentará para fundir y purgar. Purificará a los hijos de Leví y los acrisolará como el oro y la plata; y serán para Yahveh los que presentan la oblación en justicia. (Malaquías 3, 3)

  • Pero para vosotros, los que teméis mi Nombre, brillará el sol de justicia con la salud en sus rayos, y saldréis brincando como becerros bien cebados fuera del establo. (Malaquías 3, 20)

  • Jesús le respondió: «Déjame ahora, pues conviene que así cumplamos toda justicia.» Entonces le dejó. (Mateo 3, 15)

  • Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos serán saciados. (Mateo 5, 6)

  • Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos. (Mateo 5, 10)

  • «Porque os digo que, si vuestra justicia no es mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el Reino de los Cielos. (Mateo 5, 20)

  • «Cuidad de no practicar vuestra justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos; de lo contrario no tendréis recompensa de vuestro Padre celestial. (Mateo 6, 1)

  • Buscad primero su Reino y su justicia, y todas esas cosas se os darán por añadidura. (Mateo 6, 33)


“O temor e a confiança devem dar as mãos e proceder como irmãos. Se nos damos conta de que temos muito temor devemos recorrer à confiança. Se confiamos excessivamente devemos ter um pouco de temor”. São Padre Pio de Pietrelcina