Talált 2225 Eredmények: poder en Israel

  • Por tanto, di a los hijos de Israel: Yo soy Yahveh; Yo os libertaré de los duros trabajos de los egipcios, os libraré de su esclavitud y os salvaré con brazo tenso y castigos grandes. (Exodo 6, 6)

  • Estos son los jefes de sus casas paternas: Hijos de Rubén, primogénito de Israel: Henoc, Pallú, Jesrón y Karmí, éstas son las familias de Rubén. (Exodo 6, 14)

  • Y los egipcios reconocerán que yo soy Yahveh, cuando extienda mi mano sobre Egipto y saque de en medio de ellos a los hijos de Israel.» (Exodo 7, 5)

  • Pero Yahveh hará distinción entre el ganado de Israel y el ganado de los egipcios, de modo que nada perecerá de lo perteneciente a Israel.» (Exodo 9, 4)

  • Faraón mandó hacer averiguaciones, y se vio que del ganado de Israel no había muerto ni un solo animal. Sin embargo, se endureció el corazón de Faraón y no dejó salir al pueblo. (Exodo 9, 7)

  • pero te he dejado con vida, para hacerte ver mi poder, y para que sea celebrado mi nombre sobre toda la tierra. (Exodo 9, 16)

  • Pero entre los israelitas ni siquiera un perro ladrará ni contra hombre ni contra bestia; para que sepáis cómo Yahveh hace distinción entre Egipto e Israel. (Exodo 11, 7)

  • Hablad a toda la comunidad de Israel y decid: El día diez de este mes tomará cada uno para sí una res de ganado menor por familia, una res de ganado menor por casa. (Exodo 12, 3)

  • «Durante siete días comeréis ázimos; ya desde el primer día quitaréis de vuestras casas la levadura. Todo el que desde el día primero hasta el día séptimo coma pan fermentado, ese tal será exterminado de en medio de Israel. (Exodo 12, 15)

  • No habrá levadura en vuestras casas por espacio de siete días; todo aquel que coma algo fermentado, sea forastero o natural del país, será exterminado de la comunidad de Israel. (Exodo 12, 19)

  • Llamó Moisés a todos los ancianos de Israel y les dijo: «Id en busca de reses menores para vuestras familias e inmolad la pascua. (Exodo 12, 21)

  • Toda la comunidad de Israel la celebrará. (Exodo 12, 47)


“No tumulto das paixões terrenas e das adversidades, surge a grande esperança da misericórdia inexorável de Deus. Corramos confiantes ao tribunal da penitência onde Ele, com ansiedade paterna, espera-nos a todo instante.” São Padre Pio de Pietrelcina