Talált 35 Eredmények: Volvía
Ella le respondía: "¡Que no me preocupe, cuando ha muerto mi hijo!...". Todos los días salía a las afueras y oteaba el camino por donde había marchado su hijo. De nadie se fiaba. Al caer la tarde, volvía a casa, y durante la noche suspiraba y lloraba, sin poder dormir. (Tobías 10, 7)
Volvía purificada, y permanecía en su tienda hasta el atardecer, en que tomaba sus alimentos. (Judit 12, 9)
Entraba por la tarde, y a la mañana era llevada al segundo harén, bajo la vigilancia de Saasgaz, eunuco del rey y guardián de las concubinas. No volvía a presentarse ante el rey, a no ser que él lo desease y fuese llamada nominalmente. (Ester 2, 14)
Mardoqueo volvió luego a la puerta real, mientras Amán volvía a su casa triste y descompuesto. (Ester 6, 12)
pues el que se volvía a él era salvado; no por lo que contemplaba, sino por ti, salvador de todos. (Sabiduría 16, 7)
Y lo extraño era que en el agua, donde todo se apaga, el fuego se volvía más voraz, pues la naturaleza combate por los justos. (Sabiduría 16, 17)
Cuando la vasija que hacía le salía mal, como suele ocurrir con la arcilla en manos del alfarero, volvía a hacer otra vasija a su gusto. (Jeremías 18, 4)
Luego se levantó y se puso a comer, mientras el ángel del Señor volvía a llevar a Habacuc a su lugar. (Daniel 14, 39)
Cuando volvía muy temprano a la ciudad, sintió hambre. (Mateo 21, 18)
Jesús, sabiendo que el Padre había puesto en sus manos todas las cosas, que había salido de Dios y que a Dios volvía, (Juan 13, 3)
En efecto, este Melquisedec, rey de Salén, sacerdote del Dios altísimo, que salió al encuentro de Abrahán cuando éste volvía de la derrota de los reyes, y le bendijo, (Hebreos 7, 1)