Talált 4380 Eredmények: alianza con Dios
Que el Dios todopoderoso te bendiga y te haga tan fecundo y numeroso que llegues a ser una comunidad de pueblos. (Génesis 28, 3)
Que él te dé la bendición de Abrahán, a ti y a tus descendientes contigo, para que poseas la tierra en que resides, la que Dios dio a Abrahán". (Génesis 28, 4)
Arriba estaba el Señor, el cual dijo: "Yo soy el Señor, el Dios de Abrahán, tu antepasado, y el Dios de Isaac. Yo te daré a ti y a tu descendencia la tierra en que descansas. (Génesis 28, 13)
Tuvo miedo y dijo: "¡Qué terrible es este lugar! ¡Nada menos que la casa de Dios y la puerta del cielo". (Génesis 28, 17)
Jacob hizo esta promesa: "Si Dios está conmigo, me protege en este viaje que estoy haciendo y me da pan para comer, vestidos para cubrirme (Génesis 28, 20)
y puedo volver sano y salvo a la casa de mi padre, entonces el Señor será mi Dios (Génesis 28, 21)
Jacob se irritó contra ella y dijo: "¿Soy yo acaso igual a Dios, que te ha negado la fecundidad?". (Génesis 30, 2)
Raquel dijo: "Dios me ha hecho justicia y ha escuchado mi voz dándome un hijo". Por eso le puso el nombre de Dan. (Génesis 30, 6)
Dios escuchó a Lía, que concibió y dio a Jacob el quinto hijo, (Génesis 30, 17)
y dijo: "Dios me ha dado mi recompensa por haber dado mi esclava a mi marido". Y le llamó Isacar. (Génesis 30, 18)
Y dijo: "Dios me ha hecho un buen regalo. Esta vez sí que se quedará conmigo mi marido, porque le he dado seis hijos". Y le llamó Zabulón. (Génesis 30, 20)
Dios se acordó también de Raquel, la escuchó y la hizo fecunda. (Génesis 30, 22)