Talált 500 Eredmények: camino

  • Jonatán, hijo de Saúl, se puso en camino y fue a ver a David en Jores; le dio ánimos en nombre de Dios y (I Samuel 23, 16)

  • Ellos se pusieron en camino y fueron a Zif antes que Saúl. Pero David y sus hombres estaban en el desierto de Maón, en la estepa, al sur del desierto. (I Samuel 23, 24)

  • Llegó a los rediles de las ovejas que hay junto al camino; allí hay una cueva, y Saúl entró en ella para hacer sus necesidades. David y sus hombres estaban escondidos en el fondo de la cueva. (I Samuel 24, 4)

  • Cuando alguien encuentra a su enemigo, ¿le deja continuar en paz su camino? Que el Señor te recompense el bien que hoy has hecho conmigo. (I Samuel 24, 20)

  • Instaló el campamento en la colina de Jaquilá, frente al desierto, junto al camino. David, que estaba en el desierto, se dio cuenta de que Saúl venía para perseguirle; (I Samuel 26, 3)

  • Saúl dijo a David: "Bendito seas, hijo mío, David. Tendrás éxito seguro en tus empresas y tu poder será grande". David prosiguió su camino y Saúl volvió a su casa. (I Samuel 26, 25)

  • Y ahora, dígnate obedecer también tú a tu sierva: te voy a traer algo de comer; come y recupera fuerzas para proseguir tu camino". (I Samuel 28, 22)

  • Habían hecho prisioneros a las mujeres y a todos los demás, chicos y grandes, pero sin matar a nadie. Los habían llevado y proseguían su camino. (I Samuel 30, 2)

  • Joab y Abisay se pusieron a perseguir a Abner y, a la puesta del sol, llegaron a Ammá, al este del valle, en el camino del desierto de Gabaón. (II Samuel 2, 24)

  • Los hijos de Rimón de Beerot, Recab y Baaná, se pusieron en camino y llegaron, a la hora de más calor del día, a casa de Isbaal, que estaba durmiendo la siesta. (II Samuel 4, 5)

  • entraron sin ser vistos en la casa donde Isbaal estaba acostado en la cama de su dormitorio. Lo mataron, le cortaron la cabeza y caminaron durante toda la noche por el camino de la Arabá. (II Samuel 4, 7)

  • Todavía estaban de camino, cuando llegó a David este rumor: "Absalón ha matado a todos los hijos del rey; no ha quedado ni uno solo". (II Samuel 13, 30)


“Quando o dia seguinte chegar, ele também será chamado de hoje e, então, você pensará nele. Tenha sempre muita confiança na Divina Providência.” São Padre Pio de Pietrelcina