Talált 191 Eredmények: puertas

  • Dadle del fruto de sus manos y que en las puertas de la ciudad sus obras proclamen su alabanza. (Proverbios 31, 31)

  • y se cierren las puertas de la calle, y se debilite el rumor del molino, y se apague la voz del ave, y desaparezcan las canciones; (Eclesiastés 12, 4)

  • Tu cuello, una torre de marfil. Tus ojos, como las piscinas de Jesbón junto a las puertas de Bat-Rabín. Tu nariz, como la torre del Líbano, vigía que mira hacia Damasco. (Cantar 7, 5)

  • El que madrugue para buscarla no se fatigará, pues la encontrará sentada a sus puertas. (Sabiduría 6, 14)

  • Pues tú tienes el poder de la vida y de la muerte, que hundes hasta las puertas del abismo y haces subir de él. (Sabiduría 16, 13)

  • Dichoso el que se asoma por la ventana y permanece a la escucha a sus puertas; (Eclesiástico 14, 23)

  • También es grande el recuerdo de Nehemías, que nos levantó muros derruidos, puso puertas y cerrojos y restauró nuestras moradas. (Eclesiástico 49, 13)

  • Llanto y lamento habrá en tus puertas, y yacerás desolada en el polvo. (Isaías 3, 26)

  • Izad una enseña sobre un monte pelado, lanzad gritos hacia ellos, indicad con la mano que entren por las puertas de los nobles. (Isaías 13, 2)

  • ¡Abrid las puertas, para que entre el pueblo justo, que ha guardado la lealtad! (Isaías 26, 2)

  • Anda, pueblo mío, entra en tus aposentos y cierra las puertas tras de ti; escóndete un instante hasta que pase la cólera. (Isaías 26, 20)

  • Yo decía: A la mitad de mis días tengo que ir a las puertas del abismo; seré privado del resto de mis años. (Isaías 38, 10)


“Reflita no que escreve, pois o Senhor vai lhe pedir contas disso.” São Padre Pio de Pietrelcina