18. Judá se acercó a él y le dijo: "Perdón, señor. Permite a tu siervo dirigir una palabra a mi señor, sin que por eso se irrite contra él, porque tú eres en verdad como el Faraón.





“O amor e o temor devem sempre andar juntos. O temor sem amor torna-se covardia. São Padre Pio de Pietrelcina