Judit, 16
25. Mientras vivió Judit, nadie amenazó a Israel, y ni siquiera en mucho tiempo después de su muerte.
25. Mientras vivió Judit, nadie amenazó a Israel, y ni siquiera en mucho tiempo después de su muerte.
“Queira o dulcíssimo Jesus conservar-nos na Sua graça e dar-nos a felicidade de sermos admitidos, quando Ele quiser, no eterno convívio…” São Padre Pio de Pietrelcina