11. Subió de nuevo, partió el pan y comió. Luego siguió conversando con ellos hasta el amanecer, y se fue.





“Sejam como pequenas abelhas espirituais, que levam para sua colméia apenas mel e cera. Que, por meio de sua conversa, sua casa seja repleta de docilidade, paz, concórdia, humildade e piedade!” São Padre Pio de Pietrelcina