Fondare 131 Risultati per: raza
Sus hijos se harán famosos entre las naciones y sus nietos, en medio de los pueblos. Todos los que los vean reconocerán que son una raza bendecida de Yavé. (Isaías 61, 9)
No trabajarán inútilmente ni tendrán hijos para perderlos, pues ellos y sus descendientes serán una raza bendita de Yavé. (Isaías 65, 23)
Así como los nuevos cielos y la nueva tierra que voy a crear durarán para siempre, así también tu nombre y tu raza permanecerán siempre. (Isaías 66, 22)
La muerte valdrá más que la vida para los sobrevivientes de esta raza perversa en cualquier parte donde los haya echado, dice Yavé de los Ejércitos. (Jeremías 8, 3)
sino: «Viva Yavé, que sacó y trajo a la raza de Israel del país del norte y de todos los países donde los había desparramado, para que habiten de nuevo en su propia tierra.» (Jeremías 23, 8)
Si llegara a fallar este orden ante mí, dice Yavé, entonces la raza de Israel dejaría también de ser la nación que me sirve para siempre. (Jeremías 31, 36)
Si pudieran medirse los cielos por arriba y sondear por abajo los cimientos de la tierra, entonces yo también rechazaría a toda la raza de Israel por todo lo que ha hecho, dice Yavé. (Jeremías 31, 37)
y cada uno debía dejar libres a sus esclavos de raza hebrea, hombres o mujeres. Nadie debía mantener en esclavitud a uno de sus hermanos judíos. (Jeremías 34, 9)
Al cabo de siete años cada uno de ustedes dejará libre a su hermano. La persona de raza hebrea que se haya vendido a ti estará a tu servicio seis años y luego la despedirás libre. Pero sus padres no me escucharon ni se fijaron en esto. (Jeremías 34, 14)
Y ahora, Yavé, Dios de los Ejércitos, Dios de Israel, les pregunta: «¿Por qué se hacen tanto mal ustedes mismos? Ustedes van a hacer que se acaben los hombres, las mujeres y los niños de la raza de Judá, hasta que no quede nadie, (Jeremías 44, 7)
Pues yo soy el que asalto a Esaú, y descubro sus escondites, para que ya no pueda esconderlos. ¡Su raza ha sido destruida, ya no existe! No hay nadie de entre sus vecinos que diga: (Jeremías 49, 10)
Que la tierra entera sepa que tú eres el Señor, Dios nuestro, ya que Israel y su raza lleva tu Nombre. (Baruc 2, 15)