Fondare 140 Risultati per: Daniel en el foso de los leones

  • Él jugó con leones como si fueran cabritos y con osos como si fueran corderos. (Eclesiástico 47, 3)

  • Israel era una oveja descarriada, ahuyentada por los leones. Primero la devoró el rey de Asiria, y ahora, últimamente, le quebró los huesos Nabucodonosor, rey de Babilonia. (Jeremías 50, 17)

  • Pero si se encuentran en ese país estos tres hombres: Noé, Daniel y Job, ellos salvarán su vida a causa de su justicia -oráculo del Señor-. (Ezequiel 14, 14)

  • aunque se encuentren en ese país Noé, Daniel y Job, juro por mi vida -oráculo del Señor- que no podrán salvar ni a sus hijos ni a sus hijas: ellos solos se salvarán a causa de su justicia. (Ezequiel 14, 20)

  • Tú dirás: ¡Tu madre sí que era una leona en medio de los leones! Recostada entre los cachorros, amamantaba sus crías. (Ezequiel 19, 2)

  • Él se paseaba entre los leones, convertido en un león: aprendió a desgarrar su presa, devoró a los hombres. (Ezequiel 19, 6)

  • Sí, eres más sabio que Daniel: ningún secreto te supera. (Ezequiel 28, 3)

  • Entre ellos se encontraban Daniel, Ananías, Misael y Azarías, que eran judíos. (Daniel 1, 6)

  • Pero el jefe de los eunucos les puso otros nombres: a Daniel lo llamó Beltasar; a Ananías, Sadrac; a Misael, Mesac, y a Azarías, Abed Negó. (Daniel 1, 7)

  • Daniel estaba decidido a no contaminarse con los manjares del rey y con el vino que él bebía, y rogó al jefe de los eunucos que no lo obligara a contaminarse. (Daniel 1, 8)

  • Pero este dijo a Daniel: "Yo temo a mi señor el rey, que les ha asignado la comida y la bebida; si él llega a ver el rostro de ustedes más demacrado que el de los jóvenes de su misma edad, ustedes harían peligrar mi cabeza delante del rey". (Daniel 1, 10)

  • Daniel dijo al guardia a quien el jefe de los eunucos había confiado el cuidado de Daniel, Ananías, Misael y Azarías: (Daniel 1, 11)


“Os talentos de que fala o Evangelho são os cinco sentidos, a inteligência e a vontade. Quem tem mais talentos, tem maior dever de usá-los para o bem dos outros.” São Padre Pio de Pietrelcina