Fondare 58 Risultati per: Siquém

  • La concubina que tenía en Siquém también le dio un hijo, a quien puso el nombre de Abimélec. (Jueces 8, 31)

  • Abimélec, hijo de Ierubaal, fue a Siquém, donde estaban los hermanos de su madre, y les dijo a ellos y a todo el clan de la casa paterna de su madre: (Jueces 9, 1)

  • "Digan a todos los señores de Siquém: ‘¿Qué es mejor para ustedes, que los gobiernen setenta hombres -todos los hijos de Ierubaal- o que los gobierne uno solo? Recuerden además que yo soy de la misma sangre que ustedes’". (Jueces 9, 2)

  • Los hermanos de su madre comunicaron estas palabras de Abimélec a los señores de Siquém, y estos se pusieron de parte de él, porque decían: "Es nuestro hermano". (Jueces 9, 3)

  • Entonces se reunieron todos los señores de Siquém y todo Bet Miló, y fueron a proclamar rey a Abimélec, junto a la encina de la piedra conmemorativa que está en Siquém. (Jueces 9, 6)

  • Cuando le llevaron la noticia a Jotám, este se puso en la cima del monte Garizím, y gritó con voz potente: "Escúchenme, señores de Siquém, y que Dios los escuche a ustedes: (Jueces 9, 7)

  • y ahora ustedes se han levantado contra la familia de mi padre, han matado sobre una misma piedra a sus setenta hijos, y han proclamado rey de los señores de Siquém a Abimélec, el hijo de su esclava, aduciendo que es hermano de ustedes. (Jueces 9, 18)

  • De lo contrario, que salga fuego de Abimélec para devorar a los señores de Siquém y de Bet Miló, y que salga fuego de los señores de Siquém y de Bet Miló, para devorar a Abimélec". (Jueces 9, 20)

  • Pero Dios envió un espíritu de discordia entre Abimélec y los señores de Siquém, y estos traicionaron a Abimélec. (Jueces 9, 23)

  • Así debía ser castigado el crimen cometido contra los setenta hijos de Ierubaal, y su sangre debía recaer sobre su hermano Abimélec, que los había matado, y sobre los señores de Siquém, que habían sido cómplices en la matanza de sus hermanos. (Jueces 9, 24)

  • Por eso, los señores de Siquém preparaban emboscadas contra él en las cimas de los montes, y saqueaban a todos los que pasaban por allí. Abimélec fue informado de todo esto. (Jueces 9, 25)

  • Una vez, Gaal, hijo de Ebed, pasó por Siquém junto con sus hermanos, y se ganó la confianza de los señores de Siquém. (Jueces 9, 26)


“Se você fala das próprias virtudes para se exibir ou para vã ostentação perde todo o mérito.” São Padre Pio de Pietrelcina