Fondare 23 Risultati per: desaparecerán
Toda la vegetación de los bordes del Nilo y todas las plantas sembradas junto a él se secarán: serán arrasadas y desaparecerán. (Isaías 19, 7)
Los egipcios son hombres y no dioses, sus caballos son carne y no espíritu. Cuando el Señor extienda su mano, tropezará el que ayuda, y caerá el que es ayudado, y todos juntos desaparecerán. (Isaías 31, 3)
Sí, quedarán avergonzados y confundidos los que se enfurecen contra ti; serán como nada y desaparecerán aquellos que te desafían. (Isaías 41, 11)
Esto es lo que ustedes dirán de ellos: "Los dioses que no hicieron ni el cielo ni la tierra, desaparecerán de la tierra y de debajo del cielo". (Jeremías 10, 11)
Tomaré al resto de Judá que se empeñó en entrar en Egipto para residir allí, y todos desaparecerán completamente en el país de Egipto: caerán bajo la espada, desaparecerán completamente por el hambre desde el más pequeño al más grande, morirán por la espada y el hambre, y se convertirán en imprecación, devastación, maldición e ignominia. (Jeremías 44, 12)
Yo vigilo sobre ustedes para mal y no para bien: todos los hombres de Judá que están en el país de Egipto desaparecerán completamente por la espada y por el hambre, hasta ser exterminados. (Jeremías 44, 27)
Por eso, el país está de duelo y languidecen todos sus habitantes; hasta los animales del campo y los pájaros del cielo, y aún los peces del mar, desaparecerán. (Oseas 4, 3)
Derribaré la casa de invierno junto con la casa de verano; desaparecerán las casas de marfil y las mansiones se derrumbarán -oráculo del Señor-. (Amós 3, 15)
Así habla el Señor: Por compactos y numerosos que sean, ellos serán talados y desaparecerán. Aunque yo te humillé, ya no volveré a humillarte. (Nahún 1, 12)
Ellos desaparecerán, pero tú permaneces. Todos se gastarán como un vestido (Hebreos 1, 11)
Sin embargo, el Día del Señor llegará como un ladrón, y ese día, los cielos desaparecerán estrepitosamente; los elementos serán desintegrados por el fuego, y la tierra, con todo lo que hay en ella, será consumida. (II Pedro 3, 10)