29. Porque si yo inflijo un castigo, comenzando por la ciudad que es llamada con mi Nombre, ustedes, ¿van a quedar impunes? No, no quedarán impunes, porque yo llamo a la espada contra todos los habitantes de la tierra -oráculo del Señor de los ejércitos-.





“Para consolar uma alma na sua dor, mostre-lhe todo o bem que ela ainda pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina