24. La casa de Israel estuvo de duelo por ella durante siete días. Antes de morir había repartido sus bienes entre los parientes de su esposo Manasés y entre sus propios parientes.





“Queira o dulcíssimo Jesus conservar-nos na Sua graça e dar-nos a felicidade de sermos admitidos, quando Ele quiser, no eterno convívio…” São Padre Pio de Pietrelcina