Salmos, 125
2. ¡Jerusalén, de montes rodeada! Así Yahveh rodea a su pueblo desde ahora y por siempre.
2. ¡Jerusalén, de montes rodeada! Así Yahveh rodea a su pueblo desde ahora y por siempre.
“Para consolar uma alma na sua dor, mostre-lhe todo o bem que ela ainda pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina