7. Atalía y sus hijos, pervertidos por ella, han deteriorado el templo de Dios, e incluso han dedicado a los baales todas las santas reservas del templo del Señor".





“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina