Deuteronomio, 5
29. ¡Ojalá fuera siempre así su corazón para temerme y guadar todos mis mandamientos, y de esta forma ser eternamente felices, ellos y sus hijos!
29. ¡Ojalá fuera siempre así su corazón para temerme y guadar todos mis mandamientos, y de esta forma ser eternamente felices, ellos y sus hijos!
“O Anjo de Deus não nos abandona jamais.” São Padre Pio de Pietrelcina