11. Al día siguiente, cuando David se levantaba, Yavé había dirigido a Gad, el profeta vidente de David, las palabras siguientes: «Ve a decir a David esto, de mi parte:





“Você teme um homem,um pobre instrumento nas mãos de Deus, mas não teme a justiça divina?” São Padre Pio de Pietrelcina