Znaleziono 930 Wyniki dla: destrucción de Jerusalén

  • Pablo había decidido no hacer escala en Efeso ni demorarse más en Asia, pues, de ser posible, quería estar en Jerusalén para el día de Pentecostés. (Hecho de los Apóstoles 20, 16)

  • Ahora voy a Jerusalén, atado por el Espíritu sin saber lo que allí me sucederá; (Hecho de los Apóstoles 20, 22)

  • Aquí encontramos a los discípulos y nos detuvimos siete días. Advertían a Pablo con mensajes proféticos que no subiera a Jerusalén; (Hecho de los Apóstoles 21, 4)

  • Al oír esto, nosotros y los de Cesarea rogamos a Pablo que no subiera a Jerusalén. (Hecho de los Apóstoles 21, 12)

  • Pero él nos contestó: «¿Por qué me destrozan el corazón con sus lágrimas? Yo estoy dispuesto no sólo a ser encarcelado, sino también a morir en Jerusalén por el Nombre del Señor Jesús.» (Hecho de los Apóstoles 21, 13)

  • Pasados aquellos días, terminamos los preparativos del viaje y subimos a Jerusalén. (Hecho de los Apóstoles 21, 15)

  • Al llegar a Jerusalén, los hermanos nos recibieron con alegría. (Hecho de los Apóstoles 21, 17)

  • Querían matarlo, pero llegó al comandante del batallón la noticia de que toda Jerusalén estaba alborotada. (Hecho de los Apóstoles 21, 31)

  • esto lo saben muy bien el sumo sacerdote y el Consejo de los Ancianos. Incluso me entregaron cartas para nuestros hermanos de Damasco, y salí para detener a los cristianos que allí había y traerlos encadenados a Jerusalén para que fueran castigados. (Hecho de los Apóstoles 22, 5)

  • Después de regresar a Jerusalén, mientras un día me encontraba orando en el Templo, tuve un éxtasis. (Hecho de los Apóstoles 22, 17)

  • Vi al Señor que me decía: «Muévete y sal pronto de Jerusalén, pues no escucharán el testimonio que les des de mí.» (Hecho de los Apóstoles 22, 18)

  • Aquella misma noche el Señor se acercó a Pablo y le dijo: «¡Animo! Así como has dado testimonio de mí aquí en Jerusalén, tendrás que darlo también en Roma.» (Hecho de los Apóstoles 23, 11)


“Proponha-se a exercitar-se nas virtudes”. São Padre Pio de Pietrelcina