Znaleziono 566 Wyniki dla: sabiduría de Salomón

  • Entonces el rey Salomón dijo: «Que Yavé me haga morir, si no es cierto que, al hacerme esta petición, Adonías se ha jugado la vida. (1 Reyes 2, 23)

  • El rey Salomón dio órdenes a Banaías, hijo de Yoyada, el cual fue a matar a Adonías. (1 Reyes 2, 25)

  • Así expulsó Salomón a Abiatar, quitándole su oficio de sacerdote de Yavé, y se cumplió la palabra pronunciada por Yavé contra la familia de Helí, en Silo. (1 Reyes 2, 27)

  • Le dijeron al rey Salomón: «Joab se ha refugiado en la Tienda de Yavé y está al lado del altar.» Salomón mandó decir a Joab: «¿Qué te sucede, que te refugias en el altar?» Y él respondió: «Tengo miedo del rey y me he refugiado junto a Yavé.» Salomón mandó a Banaías, hijo de Yoyada, con esta orden: «Anda y mátalo.» (1 Reyes 2, 29)

  • Salomón mandó llamar a Semeí y le dijo: «Hazte una casa en Jerusalén; ahí te quedarás y no saldrás por ningún motivo. (1 Reyes 2, 36)

  • Pero se lo avisaron a Salomón: «Semeí ha ido de Jerusalén a Gat y ha vuelto.» (1 Reyes 2, 41)

  • En cambio el rey Salomón será bendito y el trono de David permanecerá ante Yavé para siempre.» (1 Reyes 2, 45)

  • El rey dio orden a Banaías, hijo de Yoyada, quien salió y mató a Semeí. Con todo esto, el reino se hizo más fuerte en manos de Salomón. (1 Reyes 2, 46)

  • Salomón emparentó con Faraón, rey de Egipto. Tomó a su hija por esposa y la instaló en la Ciudad de David hasta que terminara de construir su casa, la Casa de Yavé y la muralla en torno a Jerusalén. (1 Reyes 3, 1)

  • Por este mismo motivo Salomón ofrecía sacrificios y quemaba incienso en los santuarios de las lomas, a pesar de que amaba a Yavé y seguía los preceptos de David, su padre. (1 Reyes 3, 3)

  • El rey fue a Gabaón para ofrecer allí sacrificios, pues ése era entonces el más importante santuario de las lomas. (Sobre ese altar Salomón ofreció muchos sacrificios: unos mil holocaustos.) (1 Reyes 3, 4)

  • Salomón respondió: «Tú has tenido gran amor a David, mi padre, ya que él te servía fielmente, como es debido y con sinceridad. También le has hecho un favor muy grande permitiendo que un hijo suyo le sucediera en el trono. (1 Reyes 3, 6)


“Pense na felicidade que está reservada para nós no Paraíso”. São Padre Pio de Pietrelcina