Znaleziono 200 Wyniki dla: Altares de Incienso
No me trajiste el cordero de tus holocaustos ni me honraste con tus sacrificios; yo no te abrumé exigiéndote ofrendas ni te cansé reclamándote incienso. (Isaías 43, 23)
Te cubrirá una multitud de camellos, de dromedarios de Madián y de Efá. Todos ellos vendrán desde Sabá, trayendo oro e incienso, y pregonarán las alabanzas del Señor. (Isaías 60, 6)
Es un pueblo que no cesa de provocarme en mi propia cara, sacrificando en los jardines y quemando incienso sobre ladrillos. (Isaías 65, 3)
por sus culpas y las culpas de sus padres, por todas juntas, dice el Señor. Porque ellos quemaron incienso en las montañas y me ultrajaron sobre las colinas, yo les mediré su retribución y la pondré en su propio pecho. (Isaías 65, 7)
Se inmola un buey, y se mata a un hombre, se sacrifica un cordero, y se desnuca un perro, se presenta una oblación, y se ofrece sangre de cerdo, se quema un memorial de incienso, y se bendice una iniquidad. Porque ellos han elegido sus propios caminos y se complacen en sus ídolos, (Isaías 66, 3)
Pronunciaré mis sentencias contra ellos, por todas sus maldades, porque me han abandonado, han quemado incienso a dioses extraños, y se han postrado ante las obras de sus manos. (Jeremías 1, 16)
¿Qué me importa el incienso que llega de Sabá y la caña aromática de un país lejano? Yo no acepto los holocaustos de ustedes y sus sacrificios no me agradan. (Jeremías 6, 20)
¡Robar, matar, cometer adulterio, jurar en falso, quemar incienso a Baal, ir detrás de otros dioses que ustedes no conocían! (Jeremías 7, 9)
Las ciudades de Judá y los habitantes de Jerusalén irán a gritar a los dioses a los que quemaron incienso, pero ellos no podrán salvarlos en el tiempo de su desgracia. (Jeremías 11, 12)
Porque tan numerosos como tus ciudades son tus dioses, Judá. Tan numerosos como las calles de Jerusalén son los altares que ustedes han erigido a la Ignominia, los altares para quemar incienso a Baal. (Jeremías 11, 13)
El Señor de los ejércitos, que te había plantado, anuncia una desgracia contra ti, a causa del mal que la casa de Israel y la casa de Judá han cometido para agraviarme, quemando incienso en honor de Baal. (Jeremías 11, 17)
El pecado de Judá está escrito con un buril de hierro, está grabado con punta de diamante sobre la tabla de su corazón y sobre los cuernos de sus altares, (Jeremías 17, 1)