19. Pero el Angel del Señor, por la noche, abrió las puertas de la prisión, les sacó y les dijo:





“Que o Espírito Santo guie a sua inteligência, faça-o descobrir a verdade escondida na Sagrada Escritura e inflame a sua vontade para praticá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina