44. En los días de estos reyes, el Dios del cielo hará surgir un imperio que jamás será destruido y cuya soberanía no pasará a otro pueblo. Pulverizará y aniquilará a todos estos imperios, mientras que él subsistirá eternamente,





“Devemos odiar os nossos pecados, visto que o amor ao Senhor significa paz”. São Padre Pio de Pietrelcina