17. Porque tu sierva es devota y honra al Dios del cielo día y noche. Me quedaré contigo, señor, y saldré cada noche al valle a rezar a Dios para que me diga cuándo han cometido el pecado.





“O amor nada mais é do que o brilho de Deus nos homens”. São Padre Pio de Pietrelcina