Encontrados 75 resultados para: jueces del Antiguo Testamento

  • pues se puso a la derecha del pobre para salvar su vida de sus jueces. (Salmos 109, 31)

  • Había visto a Onías, antiguo jefe de los sacerdotes, hombre atento, bueno, humilde en sus modales, distinguido en sus palabras y que desde niño se había destacado por su conducta irreprochable. Este, con las manos levantadas, estaba orando por toda la comunidad judía. (2 Macabeos 15, 12)

  • No cambies un límite antiguo, no te apoderes del campo de los huérfanos. (Proverbios 23, 10)

  • De tal manera que cuando castigas a nuestros enemigos con moderación, lo haces para que aprendamos, para que pensemos en tu bondad cuando nos toque ser jueces, y para que confíemos en tu misericordia cuando seamos juzgados. (Sabiduría 12, 22)

  • Luego vinieron los Jueces: cada uno de ellos tiene su propia fama. Su corazón no se vendió a los falsos dioses, y no se apartaron del Señor. ¡Que sean benditos para siempre! (Sirácides (Eclesiástico) 46, 11)

  • los que hacen condenar a otro porque saben hablar y les meten trampas a los jueces al tribunal, y niegan, por una coma, el derecho del bueno. (Isaías 29, 21)

  • Yavé lo asegura: Volverán los cautivos a las carpas de Jacob, pues me compadeceré de estas moradas; la ciudad será reedificada sobre sus ruinas, y el fuerte se levantará en su antiguo lugar. (Jeremías 30, 18)

  • Yavé cumplió lo que tenía resuelto, cumplió su palabra, lo que había decretado desde antiguo; destruyó sin compasión; hizo alegrarse por tu destino al enemigo, fortaleció el poder de tus adversarios. (Lamentaciones 2, 17)

  • El rey Nabucodonosor mandó a los funcionarios, prefectos, gobernadores, consejeros, tesoreros, jueces y abogados de toda la provincia, para que se reunieran y asistieran a la inauguración de la estatua (Daniel 3, 2)

  • Se reunieron, pues, los funcionarios, prefectos, gobernadores, consejeros, tesoreros, abogados y jueces y todas las autoridades provinciales, para la dedicación de la estatua levantada por el rey Nabucodonosor (Daniel 3, 3)

  • Aquel año habían sido nombrados jueces dos ancianos escogidos entre el pueblo. En ellos se verificó lo que dijo el Señor: «La corrupción ha salido de Babilonia, de los ancianos que hacían de jueces y que parecían guiar al pueblo». (Daniel 13, 5)

  • y no quiso decirlo. Somos testigos de todo esto. LLa asamblea los creyó, ya que eran ancianos y jueces del pueblo, y la condenaron a muerte. (Daniel 13, 41)


“Onde há mais sacrifício, há mais generosidade.” São Padre Pio de Pietrelcina