Encontrados 345 resultados para: cae

  • Cuando regresó a Siquelag, se plegaron a él algunos de la tribu de Manasés: Adná, Iozabad, Iediael, Micael, Iozabad, Elihú y Siletai, jefes de mil hombres en Manasés. (I Crónicas 12, 21)

  • David dijo a Gad: "¡Estoy en un grave aprieto! Prefiero caer en manos del Señor, porque es muy grande su misericordia, antes que caer en manos de los hombres". (I Crónicas 21, 13)

  • De Judá: Elihú, uno de los hermanos de David. De Isacar: Omrí, hijo de Micael. (I Crónicas 27, 18)

  • Jorám tenía seis hermanos, hijos de Josafat, que eran: Azarías, Iejiel, Zacarías, Azariahu, Micael y Sefatías. Todos eran hijos de Josafat, rey de Israel. (II Crónicas 21, 2)

  • Si ellos te acompañan, por más que luches valerosamente, Dios te hará caer ante el enemigo. Porque es Dios el que tiene poder para socorrer y derribar". (II Crónicas 25, 8)

  • Porque hubiera sido vergonzoso pedir al rey gente armada y jinetes, para que nos protegieran en el camino contra el enemigo. Al contrario, nosotros habíamos dicho al rey: "La mano de nuestro Dios se extiende para bendecir a todos los que lo buscan, y su poder y su ira caen sobre todos los que lo abandonan". (Esdras 8, 22)

  • Porque la limosna libra de la muerte e impide caer en las tinieblas: (Tobías 4, 10)

  • Porque había pensado: "No sea que Tobías haya muerto y nos expongamos a caer en el ridículo". (Tobías 8, 10)

  • Pero ella replicaba: "Déjame, no trates de engañarme. Mi hijo ha muerto". Y todos los días salía a mirar el camino por donde se había ido su hijo, porque no se fiaba de nadie. Al caer la tarde, entraba en su casa y pasaba las noches llorando y lamentándose sin poder dormir. Cuando pasaron los catorce días de fiesta que Ragüel había prometido celebrar en honor de su hija, Tobías fue a decirle: "Déjame partir, porque seguramente mi padre y mi madre piensan que ya no volverán a verme. Te ruego, padre, que me dejes volver a la casa de mi padre. Ya te dije en qué estado lo dejé". (Tobías 10, 7)

  • Los pasaremos a sangre y fuego; sus montañas quedarán empapadas con su sangre y sus llanuras se llenarán con sus cadáveres. No lograrán resistir ante nosotros, sino que serán completamente aniquilados, dice el rey Nabucodonosor, dueño de toda la tierra. Porque él ha hablado y sus palabras no caerán en el vacío. (Judit 6, 4)

  • Entonces serás atravesado por la espada de mi ejército y por la lanza de mis guerreros, y caerás entre sus heridos cuando yo vuelva del combate. (Judit 6, 6)

  • Por eso, señor, no entres en combate con ellos y no caerá ni uno solo de tu pueblo. (Judit 7, 11)


“Menosprezai vossas tentações e não vos demoreis nelas. Imaginai estar na presença de Jesus. O crucificado se lança em vossos braços e mora no vosso coração. Beijai-Lhe a chaga do lado, dizendo: ‘Aqui está minha esperança; a fonte viva da minha felicidade. Seguro-vos, ó Jesus, e não me aparto de vós, até que me tenhais posto a salvo’”. São Padre Pio de Pietrelcina